Cómo el Cineasta Noel Braham, Inspirado por un Asistente de Producción (AP) sin Hogar, Escribió Guiones que Importan

"Tuve un ayudante de producción que me ayudaba gratuitamente... trabajaba incansablemente, sin quejarse. Era increíble trabajar con el chico".

"Me dijo que lo dejara en la estación de tren, y le dije que no, que lo llevaría a casa".

"Y me eché a llorar porque aquí estoy, viviendo tan cerca de toda una comunidad... a la que ni siquiera he prestado atención", señaló Braham. "Y está literalmente a una calle de mi antiguo complejo de apartamentos."

"Muchos de los estereotipos que ponemos a los que están dentro de la comunidad de los sin techo, yo también se los asigné. Siempre estaba bien vestido. El tipo no parecía como si tuviera algún tipo de locura. Lo único distinto era su energía: era sumamente desinteresado y daba su tiempo al proyecto sin pedir dinero a cambio. Solo quería ayudar a crear, en la medida de sus posibilidades".

"Al vivir en el centro de la ciudad, quiero encontrar algo que esté conectado con mi comunidad, que pueda devolver a quienes me rodean". Porque, ¿qué somos como narradores? Estamos tratando de ayudar a la gente a entender algo... Estamos tratando de inspirar. Estamos tratando de motivar".

"He podido sacar muchos de mis éxitos y fracasos de los tres cortometrajes que he hecho antes de este punto, y los estoy aplicando ahora a este proyecto y va a ser algo que el público va a disfrutar. Será entretenido. Será genial. ¡Y pronto llegará!"

"Creo que [los guionistas] complican demasiado el proceso. Si tienes una historia que quieres contar y te apasiona, es importante que confíes hacia dónde quieres que vaya la historia. Luego considera la estructura, el desarrollo del personaje y las cosas que quieres decir con él. A partir de ahí, llévaselo a alguien que tenga más experiencia que tú, que sepas que puede ser un mejor escritor".

"Sigue adelante. Este proceso no es fácil, de lo contrario, todo el mundo lo estaría haciendo. Y los que lo están haciendo, y lo están haciendo a un nivel excelente, fracasaron y fracasaron y fracasaron y fracasaron y fracasaron y fracasaron. Así que, está bien fallar durante el proceso de ser guionista. Y está bien si tienes una historia en mente, y no fue recibida tan bien como querías. En última instancia, el éxito viene porque nunca te detienes y persistes a través de los obstáculos, los desafíos y las montañas. Y entiende que todo lo bueno nunca es fácil. Hagas lo que hagas, sigue luchando, sigue escribiendo, sigue contando tu historia y cambia el mundo día a día".

"Por lo general, cuando hago mi primer borrador, me gusta que todo esté en la página".

"En realidad no hago esquemas en mi primer borrador. Simplemente escribo todo lo que me inspira, los matices de lo que sucede con el personaje, el subtexto del entorno, y a medida que avanzo hacia el segundo borrador, empiezo a delinear desde allí. Trazo más mis "beats" y pienso cuál es la mejor manera de contarlo para que sea entretenido e inspirador.

"Para cuando estoy entrando a mi tercer borrador, lo estoy enviando a otras personas para que me den su opinión. Me acerco a gente que sé que va a ser brutalmente honesta. No hay nada más difícil que cuando se muestra la obra en un público repleto en un teatro y estás masticando la escritura diciendo que debería haber hecho esto, debería haber considerado aquello".

"La reescritura final se lleva a cabo en el proceso de posproducción. Tienes una idea de lo que quieres. Y luego entras en el proceso de filmación... lo que cambia un poco para luego entrar en el proceso de edición que también cambia. Por último, entras en el producto final".