¿Por Qué Escribir Historias? Estos 3 Profesionales Nos Dan Vida con sus Respuestas

Escribir historias de cualquier tipo ha sido una de nuestras formas de protegernos contra el mundo real, así como de enfrentarnos al mundo real. Estas historias fantásticas se remontan a hace mucho tiempo. Lo primero que compartimos fueron historias alrededor de fogatas y cosas similares. En parte nos ayudan a abordar los problemas del mundo real: podemos ponerlos en una historia, darles un mejor tercer acto, darles una resolución que sea más satisfactoria para nosotros, en lugar de ver cómo se desarrollan día tras día sin una resolución clara. Podemos poner la resolución en la historia, y también podemos ponernos más directamente en esa historia para que tengamos la oportunidad de enfrentarnos a esas situaciones, tener influencia sobre lo que está sucediendo y luego ser parte de la solución. Contar historias no es solo una fantasía. Es nuestra manera de darle sentido al mundo en el que vivimos y siempre ha sido así.

Y a veces, cuando las escribes y eres Jonathan Maberry, la gente compra millones de ellas. Y, para nosotros es impresionante leerlas.

Es como jugar a ser Dios. Estás recreando el mundo de una manera que entretiene o conmueve a la gente, o simplemente los saca completamente de su realidad y les permite escapar de lo que está sucediendo en su vida diaria, cosas que no pueden controlar para luego sumergirse en este pequeño mundo imaginario. O, ¡gran mundo imaginario!

¿Sabes? Solo puedo hablar personalmente de por qué elegí los guiones: era un fanático del cine. Me encantaban las películas. Me encantaba todo sobre las películas. Me identificaba con las películas. Empecé a pensar en películas. Estudié cine. Fui a la escuela de cine. Escribir guiones es una consecuencia natural de lo que me gusta. Cuando tienes pasión por algo, y quieres estar involucrado en algo, y quieres hacer algo como una película, harás lo que puedas para hacer películas. Escribir guiones trata de eso. Es ser cineasta. Hay tantas otras cosas en las que uno se arriesga en la vida. Hablas de volver a las fogatas. La humanidad siempre ha tratado de tener éxito en algo, a pesar de que las probabilidades no estén a su favor. Escribir guiones no es diferente a eso. Hacer películas no es diferente a eso. Y el otro aspecto de eso es que si tienes éxito y lo consigues, el resultado es extraordinario. Es increíblemente satisfactorio hacer una película y que salga bien. Por ello, vale la pena intentarlo.

Y creo que la gente debería perseguir su sueño. Si este es realmente tu sueño, y esto es lo que quieres hacer, la única manera de lograr tu sueño es intentándolo. Incluso si tu película no termina siendo producida y no terminas teniendo ese éxito de guionista que pensabas, al final del día sabes que tu mayor temor es estar en tu lecho de muerte diciendo 'qué hubiera pasado si' y no quiero nunca llegar a decir 'qué hubiera pasado si'. Pero… también creo que es bueno ser práctico. Así que si ya tienes un guión que es una gran historia y está en tu disco duro, ¿por qué no la escribes en forma de novela para que al menos la gente la lea y te sientas validado de que estás conmoviendo a las personas con tus palabras?

Si sientes el impulso de crear, debes crear, porque de lo contrario, creas dentro de ti la insatisfacción de que tienes esta historia que quieres contar y no la cuentas por miedo. El miedo no es parte del plan de negocios de ninguna persona exitosa. El miedo es lo que nos impide intentarlo. Cuando escribí mi primera novela, no tenía idea de que se iba a vender. Durante 25 años, había sido un tipo dedicado a la no ficción. Escribí una novela solo porque quería escribir una novela sobre un tema que no había sido cubierto por otra persona. Lo hice por diversión, pero luego pensé, ¿por qué no intentar conseguir un agente? ¿Quién dice que no puedo? Si eres un autor inédito, no hay ninguna prueba de que no puedas ser el próximo éxito. Entonces, ¿por qué no intentarlo? Y ese se convirtió en mi plan de negocios. ¿Por qué no? ¿Por qué alguien que ama lo que hace y se esfuerza, no puede tener éxito? Adelante, inténtalo, quizás funcione.

Esas son mis cuatro palabras favoritas. Deberían aparecer en una camiseta. ¿Por qué yo no? En serio. ¿Por qué yo no?

Y no es una cuestión de arrogancia. Es una cuestión de optimismo.

Absolutamente. Es optimista. Es esperanza, es esforzarse y hacer todo lo posible. Le pasa a la gente. La gente tiene éxito. ¿Por qué yo no?

Hagamos esas camisetas.

Voy a registrarlo como propiedad intelectual para ganar dinero con esta idea.

Asegúrate de mandar a hacer gorras. Quiero una.